La Jueza Federal de Primera Instancia de Comodoro Rivadavia, Eva Parcio de Seleme, dispuso la captura internacional del buque chino Jing Yuan 626, detectado por el guardacostas GC-24 Mantilla de Prefectura, cuando pescaba ilegalmente dentro de la Zona Económica Exclusiva. También determinó la misma orden para los cuatro barcos, de la misma bandera, que, en una peligrosa maniobra, intentaron cercar y colisionar al guardacostas, poniendo en riesgo la vida de la tripulación.
La Magistrada notificó de esta situación al jefe de la Prefectura Naval Argentina, Eduardo Scarzello, a cargo del procedimiento de persecución del buque.
El Jing Yuan 626 había sido detectado, el 21 de febrero, pescando ilegalmente, a la altura del Golfo San Jorge, por lo que rápidamente Prefectura activó el protocolo para detenerlo.
En una primera instancia se efectuaron reiteradas llamadas, en castellano y en inglés, y señales sonoras para que detenga la marcha, sin obtener ninguna respuesta. Inmediatamente, el buque chino apagó todas sus luces y comenzó a navegar hacia aguas internacionales, con la intención de escapar.
El capitán del guardacostas, en un operativo coordinado por el jefe de la Prefectura y siguiendo los lineamientos impartidos por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, comenzó la persecución del pesquero. Sin embargo, este no acató la orden, por lo que se efectuaron disparos intimidatorios para evitar que continuara navegación.
Cuando se desarrollaba el operativo, se acercaron a la zona otros cuatro buques que realizaron peligrosas maniobras e intentos de colisión para impedir que el Jing Yuan 626 fuera detenido.
Luego de casi ocho horas de seguimiento, debido a la posición y trayectoria del buque infractor y del guardacostas, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de la Nación ordenó interrumpir la persecución.